¿Cómo trabajar las materias del ámbito, Lengua y Literatura y Geografía e Historia, con un alumnado de perfil tan sumamente diverso? Esta fue la pregunta que me hice al comienzo del curso. Y este era el reto. La “enseñanza tradicional” quedaba descartada a la par que el libro de texto se convertía en un documento más de consulta, y no en la guía del aprendizaje. Por eso aposté por crear Situaciones de Aprendizaje adaptadas a las fortalezas, intereses y características del alumnado.

Tomé varias decisiones importantes:

▪ Trabajar desde “lo macro a lo micro”: los Objetivos de la ESO serían mi punto de partida y mi destino, y no la consecución de “ciertos estándares o descriptores de aprendizaje”.
▪ Trabajar la cultura del pensamiento en el aula, retar a mis alumnos y mantener altas las expectativas de lo que podían lograr.
▪ Observar y escuchar a mis alumnos para ir adaptando las Situaciones de Aprendizaje a sus intereses, fortalezas y necesidades. Favorecer y potenciar un aprendizaje más personalizado y rico.
▪ Apostar por la evaluación formativa. Ofrecerles un feedback periódico y positivo, concediéndoles la
oportunidad de corregir sus errores.
▪ Realizar actividades de autoevaluación y de metacognición.
▪ Mantener comunicación permanente con los alumnos, en clase y fuera de ella.
▪ Realizar entrevistas periódicas con los alumnos, solos o con sus familias, e informar periódicamente a las familias del rendimiento y/o proceso madurativo de sus hijos.
▪ Intentar que lo que hiciéramos en el aula tuviera un impacto en su vida personal.
▪ Destinar las horas de Tutoría para realizar visitas pedagógicas de su interés (Biblioteca, Centro Joven, exposición “YouToo”, Abycine, Symphony), asistir a charlas o invitar a ponentes externos (Taller de Salud Sexual, Charla sobre Grados Medios de FP, Charla sobre el ejército…).
▪ Mostrar al resto de miembros de la comunidad educativa los trabajos, proyectos realizados por los
alumnos de Diver 1: exposiciones en la entrada del instituto, participación en la Feria STEAM, publicación de sus trabajos en mi blog “¿En qué mundo vives?”, presentación de sus proyectos a los alumnos de PMAR 1, etc.
▪ Seguir formándome en destrezas de pensamiento, DUA, metodologías STEAM, Cultura Maker, etc.
Así surgieron las Situaciones de Aprendizaje que llevé a cabo en el aula. El objetivo era trabajar de una forma más holística, integradora y personalizada las diferentes disciplinas del ámbito para ayudar a los alumnos a comprender el mundo, desarrollar las diferentes competencias, mejorar su capacidad de observación, desarrollar su pensamiento analítico, su pensamiento crítico y su pensamiento creativo; desarrollar su autoconocimiento, su gestión emocional o autocontrol. En definitiva, propiciar su capacidad para pensar, su enriquecimiento personal, su madurez y su crecimiento como seres humanos.

Algunas de las Situaciones de Aprendizaje que surgieron fueron las siguientes:
➢ ¿Por qué nuestro mundo está en peligro? (Geografía física, política y humana. Globalización. ODS)
➢ Malala y las niñas del mundo luchan por su educación. (Geografía, Historia y Lengua)
➢ Aprender a pensar leyendo mitos griegos. (Lengua, Literatura, Historia)
➢ Viajemos en el tiempo: De la Edad Media a la Edad Moderna. (Historia e Historia del Arte)

El resultado fue una mayor implicación y motivación de los alumnos, mayor cohesión en el aula y niveles de logro destacados.