África, Mil historias

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Autor/es - Autora/s

Javier Ibañez Iborra, Nerea Ibañez Martínez

Centro Educativo

CEIP Marqués de la Real Defensa de Tafalla

Etapa Educativa

Primaria

Categoría

Premio

Peonza de Oro

A DESTACAR

Es un proyecto magnífico, que moviliza a toda una clase para crear conciencia de la situación en África y del problema migratorio y social, desde un enfoque inclusivo, alegre, constructivo, multicultural y enriquecedor. Conecta al alumnado con el mundo, como protagonista a través de un análisis conciso de la realidad y de acciones con las que, gracias al sentido educativo del uso de la tecnología para crear redes colaborativas y conectar a las personas, permite conocer realidades, compartir, formarse y contagiar de ilusión a otras personas. Además, se enlaza de manera coherente con el currículo desde un enfoque multidisciplinar y coherente, también en su evaluación. Es un proyecto que implica al alumnado en primera persona en la lucha por alcanzar los ODS, con sentido crítico, formativo, pero también celebrativo. Es un proyecto transformador, que nos recuerda el enorme poder transformador que la educación tiene y debe tener en la sociedad. ¡Bravo!
Especial Diversidad

Idioma

Castellano

Materia

Ciencias Sociales

Edición

2024

CCAA / País

Navarra

Metodología

Aprendizaje Servicio

Destacado

Aprendizaje Significativo

DESARROLLO DEL PROYECTO

Con este proyecto hemos buscado dotar al alumnado de herramientas que le sirvan para desarrollar su proyecto de vida personal, social y profesional de manera satisfactoria, trabajando situaciones y problemas que les ha situado en la propia vida real, buscando soluciones reales a problemas reales, con situaciones de aprendizaje significativas y relevantes: Historia de África, el colonialismo y neocolonialismo, el extractivismo, los niños soldados, el matrimonio infantil, la MGF, la explotación infantil, los derechos humanos, el cambio climático, los ODS…

La mencionada premisa de «conocimiento con compromiso» ha desarrollado en el alumnado una actitud responsable al conocer la degradación del medioambiente (de las personas, los animales y los ecosistemas, pues todos somos parte de esa One Health) y ha tomado conciencia de su responsabilidad como consumidor, conociendo que las decisiones de compra que toma a nivel local tienen una repercusión global en la degradación del medioambiente.

  • Reflexionar sobre el origen de los alimentos y productos que consumimos, analizar las consecuencias que implican nuestras decisiones de consumo y diseñar propuestas de cambio que impliquen mejoras en el cuidado de las personas, del entorno natural y del planeta.
  • Apostar por un consumo responsable que evite las condiciones de injusticia social en los países productores juzgando críticamente las necesidades reales que tenemos, desligándolas de modas, precios o campañas publicitarias (compra compulsiva de móviles y el coltán del Congo, la esclavitud en Costa de Marfil para producir cacao, la deforestación de la selva, las repercusiones en la población ante la pesca extractivista, las minas ilegales, etc.).
  • Visión sistémica en una educación ecosocial para la ciudadanía global y una preocupación real ante el cambio climático y sus terribles consecuencias a nivel mundial: el norte es el que más contamina, pero es el sur global el que más sufre las consecuencias (sequías, inundaciones, elevación del nivel del mar, aumento de la temperatura…) lo que les obliga incluso a realizar migraciones climáticas.
  • Desarrollar un espíritu crítico que sea capaz de detectar situaciones de inequidad y exclusión a partir de la comprensión, por ejemplo, de la problemática de monocultivos (Costa de Marfil es el mayor exportador del mundo de cacao, pero también es su espada de Damocles o la vainilla en Madagascar), las harinas de pescado en Gambia, Senegal sin pesca tradicional, etc.
  • Reconocer los conflictos que existen tras la extracción global de materias primas (el Congo se desangra — cobalto, cobre, coltán…— para que podamos conectarnos a Internet y fabricar coches eléctricos) y entender que deben resolverse de manera pacífica.
  • Aceptar la realidad de que se puede vivir sin tener todo tipo de alimentos en todas las estaciones del año: no queremos naranjas de Sudáfrica en verano, por la huella de CO2, por las condiciones laborales en origen y porque es mejor para el planeta consumir productos de proximidad y de temporada.

Además, este proyecto responde al derecho que tienen a ser educados en la cultura de la era digital, evaluando sus beneficios y riesgos y haciendo un uso ético y responsable que contribuya a la mejora de la calidad de vida personal y colectiva. Y, además, como se demuestra en este proyecto, las redes sociales pueden ayudar a alumnado con timidez, con problemas a la hora de expresarse, con falta de autoestima y confianza. En resumen: aportar al alumnado las destrezas necesarias para utilizar las TIC como Tecnologías del Aprendizaje y el Conocimiento (de las TIC a las TAC) y explotar el potencial de las redes sociales para ponerse en contacto e interaccionar con personas, instituciones organizaciones de todo el mundo y comprometerse con los Derechos Humanos.

Además, al conocer sociedades tan distintas y ricas y tener contacto con personas de 27 países, les hace mucho más fácil sentirse parte de sociedades abiertas y cambiantes, valorando la diversidad personal y cultural como fuente de riqueza e interesándose por otras lenguas y culturas: sorprenderse con la existencia de Nollywood, la riqueza musical de la rumba congoleña —Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad—, el bongo flava o la repercusión femenina, disfrutar de la pléyade de escritores y escritoras africanas, saber que en África hay ¡más de 2000 lenguas!… En definitiva, maravillarse con la diversidad y sentirse parte de un proyecto colectivo, tanto en el ámbito local como en el global, desarrollando empatía y generosidad.

Y todas las habilidades desarrolladas en este proyecto, además, les van a permitir seguir aprendiendo a lo largo de su vida, pues la meta no es (nunca lo ha sido) la mera adquisición de contenidos sino aprender a utilizarlos para solucionar necesidades presentes y futuras de su vida.